Nuestros inicios en los años 80, en el arte marcial chino (Escuela Ming-Chuang) de la mano del inolvidable maestro Don Jose Luis Amado, empezó a forjar nuestro espíritu de saber y formarnos en tan amplio campo. Basado en la defensa personal, el respeto y la actitud, en la recopilación de técnicas de cualquier origen y adaptarlas a las necesidades y aptitudes de cada uno, formó el espíritu de trabajo al cual, hasta hoy creemos seguir siendo fieles.